Una estrategia con efectividad del 98 por ciento, conocido como Código Alba o protocolo naranja, será implementado en la entidad con el objetivo de hacer más eficiente la atención a los reportes de desaparición de personas en Nuevo León.
El gobernador Samuel García Sepúlveda explicó que este método permite una reacción inmediata no sólo de autoridades sino también de gasolineras, de hoteles, de Cámaras, entre muchos otros organismos civiles.
“Porque entre todos vamos a ir a buscar a quien, por cualquier motivo, nos denuncie que no se encuentra”, agregó.
Entre las medidas urgentes anunciadas por el mandatario estatal también se incluyó la creación de un centro de mando coordinado por el C5 y en comunicación con las policías de proximidad de cada municipio, la Comisión Estatal de Búsqueda, Comisión Estatal de Víctimas, el Grupo Especial de Fuerza Civil y la Fiscalía General del Estado.
Además, se buscará crear convenios de colaboración con Tamaulipas, Coahuila y San Luis Potosí en materia de búsqueda de personas. Igualmente se destinó una nueva partida de 50 millones de pesos a la Comisión Estatal de Búsqueda